lunes, 30 de abril de 2018

Show mediático

Se celebró en la sede del Cabildo de Tenerife, este pasado viernes, esa pomposa sesión plenaria que ha venido a denominarse Debate sobre el estado de la Isla, a imagen y semejanza de los que acontecen en otras esferas, verbigracia los de la nación y/o de la nacionalidad (autonómicos). Cuyas conclusiones no reflejan si las susodichas se hallan en estado de buena esperanza, o, por el contrario, agonizan para siempre jamás. Se trata de una mera toma de posiciones ante una cuestión que los ciudadanos solemos ver de manera diferente a los argumentos que esgrimen los grupos políticos, bien sean de gobierno, bien sean de la oposición. Después de los discursos, réplicas y contrarréplicas, todo quedará exactamente igual.
Muchos somos los realejeros, y no me refiero solamente a los que componemos la Peña Los Roques (colectivo de la tercera juventud que se reúne periódicamente en el seno de la agrupación socialista realejera; tomen ejemplo por otros lares), que se nos agota la capacidad de asombro con las ocurrencias de Manuel Domínguez. Quien, haciendo una excepción a sus reiteradas ausencias a las convocatorias cabilderas –los cargos orgánicos ya le sobrepasan, aunque a veces asiste, firma y desaparece; lo de cobrar las dietas lo estás pensando tú– hizo acto de presencia para echar en cara a Carlos Alonso –cuando ambos visitan las obras de la Avenida de Canarias o El Castillo (ya saben, 80-20) se comportan como coleguitas de patio de colegio– que los problemas de movilidad, económicos, de estrés y de salud a que nos tiene sometidos el colapso de tráfico se deben a la falta de planificación y adopción de medidas por el mandatario insular.
Obvió, faltaría más, los millones adeudados por su partido político, el que ha regido los destinos nacionales en las dos últimas legislaturas, y que la justicia ha dicho que efectivamente nos corresponden. No es, pues, pataleta de niño chico el que el consejero del ramo se lo eche en cara.
Como los realejeros le seguimos abonando la soldada religiosamente cada mes, a pesar de que por sus desapariciones continuas se la tiene menos que merecida, y no disfrutamos en el pueblo de esa fluidez en el tráfico que reclama a otros en el ámbito insular, nos gustaría que en casi todas las horas del día las entradas y salidas de la Villa de Viera se pudieran llevar a cabo, con la diligencia que él solo ve cuando, reitero, traspasa las lindes municipales. Los Barros, Los Cuartos, San Vicente, La Zamora y La Montaña… Camiones, guaguas, vehículos ligeros… Claro, si no está nunca, cómo se va a enterar. Y la pléyade de liberados que aquí permanece, punto en boca no sea que el año próximo pase a incrementar la lista de parados.
CC es una plaga para Tenerife, sentencia. Y no se lo voy a discutir, para que vea que en algo podemos estar de acuerdo. Pero no es su grupo un dechado de virtudes para mi villa norteña. Al que reconozco, sin embargo, que se lo monta muy bien en eso mismo que usted tanto le critica al presidente del Cabildo. Cuando suelta la guinda de que los representantes del PP no se van a someter a sus espectáculos mediáticos, ¿no es capaz, siquiera sea por un segundo, de cerrar los ojos y repasar sus esporádicas apariciones en el pueblo? Porque ya vive más fuera que dentro. Y cuando viene solo está pensando en la sesión de fotos. Que tanto han mimetizado sus compañeros de viaje que ya van sin su paternal compañía a retratarse en la Cruz del Peral, en Palo Blanco o en Icod el Alto. Cuidado con estos desmadres, que de la confianza nace el peligro.
Show mediático, le espetó al señor Alonso en el debate de marras. Y ya van unas cuentas veces que salta con ese estribillo. ¿Cómo es posible que al menos Ledesma no le recuerde lo que yo intento aconsejarle con la composición que ilustra este post? Que es un simple y escueto botón del amplísimo muestrario que podríamos rescatar de redes sociales. Tanto le gusta lo de show mediático, que se expone a que le restrieguen los bezos. Como yo lo estoy haciendo ahora mismo. Y te comento, Manolo, que con varios centenares de lectores –súmales sus familias– mucho posible votante se halla sumido en un mar de dudas. Hablan conmigo cuando me ven dando el pateo de rigor. Contigo no, porque no te encuentran. ¿Cómo? Sí, ya sé que son batallitas de abuelo, cosas de viejo. Si yo te dijera que personajes populares cercanos cuestionan tus asiduos postureos, ¿me creerías? Vale, vale, perdona. Los endiosamientos son así.
Por las esferas nacionales las aguas bajan muy turbias. Y el peligro de contagio es evidente. Ya se ha producido alguna deserción en La Palma. Muchos seguirán agarrados a la teta del poder, pero otros pueden echar a funcionar las neuronas. Que no te ocurra lo que a CC en el Puerto. Donde para Juan Carlos Marrero ha sido todo un éxito que en la asamblea para elegir candidato a la alcaldía no haya habido ni discusiones ni peleas. Para rematar con “ella [se refiere a Sandra, la elegida] ha dicho que perdió las elecciones [las de 2015] porque yo iba en el segundo lugar”. Acabarán como en el Realejo.
Gracias, alcalde, sabía que contaba con tu comprensión. Llega uno a un punto en que solo sirve para dar consejos. Y el que yo vaya a votar por la candidatura socialista, no significa que nos pierdan las formas. Es más, un día de estos te dedico una décima. Pero deja ya lo de show mediático. Estás chingando hacia lo alto y te vas a enchumbar. De nada, hombre, para eso estamos. A mandar. ¡Uy!, que me olvidaba: Cuando te saquen una foto en el despacho, aparte de agarrar el ratón, que está bien, mira también para la pantalla. Es que, si no, aparte de que algún periodista atrevido pueda poner en duda tus capacidades y títulos, canta sobremanera; más parece un show que otra cosa.

viernes, 27 de abril de 2018

Otro repaso

Para el artículo de los viernes me suele ocurrir, con bastante frecuencia, que echo mano de lo que yo considero un repaso semanal. Que no es completamente cierto porque el comentario queda redactado en la tarde del jueves y aún queda tela por cortar. Puede que tampoco sea lo que haya trascendido con mayor incidencia en el mundo informativo, pero como de este blog, con el permiso de todos ustedes, soy el único responsable, allá vamos con este ramillete.
Me imagino que se acordarán todavía de un señor de Gran Canaria, quien fuera ministro de uno de los gobiernos de Mariano, y que tuvo que arrancar la caña por un turbio asunto de papeles relacionados con un país atravesado por un canal. Pues el susodicho José Manuel Soria, dedicado ahora al asesoramiento, sigue disfrutando de escolta policial, amén de sueldo de consolación, incluso para sus viajes privados o de negocios. El último de ellos a Lanzarote, tierra en la que se encuentra como pez en el agua, donde suele pasar vacaciones en hoteles ilegales y a la que acude para gestionar, en ayuntamientos que casualmente gobierna su partido, asuntos relacionados con recalificaciones de terrenos. Da la impresión de que los populares pretenden asegurar sus pertenencias antes de que el barco se hunda definitivamente.
No anda tampoco Coalición Canaria por este Norte muy sobrada. Ya conocerán que en Puerto de la Cruz se disputaban Sandra y Juan Carlos el honor de encabezar la candidatura para las elecciones de mayo de 2019. Los culpables de la debacle de 2015 (pasaron de ocho a cuatro concejales) dilucidaban a cara de perro –las declaraciones previas a esta cita denotaban el nivel de armonía existente en el comité local– cuál de ellos sería el (in)feliz afortunado de realizar el cuádruple salto mortal hacia atrás. La responsable política del feo asunto de Lago Martiánez ha resultado ganadora en la lucha intestina. El perdedor, para dar un poco de alegría a la alicaída parroquia, y nada más conocerse el resultado, ha soltado la guinda de que con ella ni a misa. Y como por mi pueblo Enrique lo tiene más negro que los sobacos de un grillo, pon tus barbas a remojar, estimado Paco Linares, no sea que la Villa también se sume a la fiesta subiéndose al carro de los despropósitos.
Lo de Cifuentes, con tu permiso, en dos décimas, para variar:
Se fue Cristina Cifuentes,
que vino a regenerar,
y se tuvo que  largar
por asuntos malolientes.
Unos hechos evidentes,
aunque los tilde de errores,
causan al PP dolores,
ya en el borde del abismo,
y diarreas, asimismo,
con tremendos escozores.

Bien lozana, tersa y fresca,
Cifuentes ya dimitió,
al PP regeneró
añadiendo nueva muesca.
Con esa actitud chulesca,
con que vive el caradura,
dijo con total frescura
que la crema detectada
a su bolso fue enviada
por una extraña conjura.

Los Presupuestos Generales del Estado (PGE) se están convirtiendo en una vulgar subasta. Y en la misma, somos los pensionistas la moneda de cambio. Aparece y desaparece el dinero con facilidad pasmosa. Espero que seamos capaces los viejos de no volver a hacer el gilipollas y poner a tantos mercaderes en su sitio. Porque nuestro derecho no es pelota de pimpón con la que se juega alegremente. Así que ya saben, estimados mayores, abran bien los ojos. Somos muchos millones y la balanza se inclinará a nuestra conveniencia.
Las Fiestas de Mayo de la Villa de Viera, recientemente presentadas en la Casa Municipal de la Cultura, estarán dedicadas al relevo generacional. Eso leo. Y no lo entiendo. Espero que el alcalde me lo explique con más detenimiento cuando nos tropecemos en cualquiera de las superficies comerciales del pueblo. O deberé recurrir a alguno de sus voceros oficiales, de esos que inundan las redes sociales con muchas fotos y escritos que merecen un comentario de texto en las pruebas de acceso la universidad por su cuidado estilo en la composición y por constituir un dechado de virtudes ortográficas.
Sigo esperando a que alguien (consejero, diputado o similar) me explique el porqué existen estaciones de servicio en estas islas (Fuerteventura puede ser un ejemplo significativo) en las que debes ser tú el que suministres el combustible a tu vehículo. Uno no ha realizado curso alguno de preparación al manejo de sustancias altamente peligrosas. Y puedo armar un desaguisado de imprevisibles consecuencias. ¿O no?
¿La reforma electoral en Canarias o el rosario de la aurora? Como no se ponen de acuerdo, y mucho menos aceptan que todo podría pasar por una reducción del número actual, lanzo la enésima propuesta que consistiría en elevar la cantidad de sillones a los que quepan en toda la manzana de Teobaldo Power, aunque ello signifique expropiar cuantos edificios sean menester. Siempre que el montante no sea inferior a doscientos cincuenta o trescientos. Y si me apuran, trescientos cincuenta, porque no vamos a ser menos aquí que en Madrid. Así podría Casimiro fletar el Benchijigua o, incluso, llevar a cabo una sesión plenaria en cualquiera de los edificios que se encuentran en La Gomera muertos de risa porque no se han usado jamás.
Disfruten del fin de semana, que abril va con la proa hacia el marisco.

jueves, 26 de abril de 2018

Asombrado

No salgo de mi asombro. Debe ser que los años me juegan malas pasadas. O que no tengo necesidad de esto (escribir), que me comentan algunos. Pero aquí sigo, (don) erre que erre, a lo Paco Martínez Soria.
Andaba yo tranquilito y relajado por tierras majoreras (Club Caleta Dorada, Caleta de Fuste –o El Castillo–, Antigua, a través de Mundiplan –Imserso–, 8 días (7 noches), todo incluido, 188,80 euros por cabeza), cuando en el pueblo se convoca rueda de prensa para dar a conocer logros del equipo de gobierno actual –qué digo, osado de mí, de Manolo y Adolfo, que ya Noelia se halla en declive– desde que accedieron a los despachos de la Avenida de Canarias. Y olvidaron –me imagino que de manera intencionada– que algunos conservábamos unas revistas publicadas cuando estaban en la oposición y que me valieron para los artículos de lunes y martes de esta misma semana. Aprovecho para agradecer nuevamente la amabilidad de los bastantes centenares de lectores que cada día se alongan conmigo Desde La Corona.
El señor Domínguez reduce todo su argumento al hecho de gestionar el ayuntamiento como si de una empresa privada se tratase. Priman los números, el disponer en caja de muchos miles de euros y de presumir de unas cuentas saneadas. Hecho, por cierto, que las obligaciones impuestas por Hacienda, junto a restricciones y amenazas de intervención, se ha producido en la inmensa mayoría de consistorios españoles. Y no digo que ello sea malo per se, pero cuando aún se requieren actuaciones que claman al infinito, no te jactes de tener la cartera llena de billetes si existen necesidades que cubrir.
No comparto esa alegría de que Los Realejos es ahora “un mejor lugar para vivir”. Se me argumentará que son ópticas o cristales. Vale, pero, y es solo un ejemplo, las entradas y salidas del municipio no están como para lanzar voladores. Son más las empresas que han echado el candado que las que han abierto sus puertas. Tenemos menos habitantes –unos cuantos miles– y la lista del paro no desciende al ritmo de júbilo que nos pretenden vender. Mucho que hacer en el capítulo del Patrimonio Histórico. Y no sigo porque no les voy a elaborar programas electorales, que luego serán incumplidos.
Se lamenta –menos mal que se le ve un detalle– de no tener aprobado el Plan General de Ordenación (PGO). Como no se culpa a nadie (Cabildo, Gobierno autónomo u otros donde no sea el PP el que corta el bacalao), deduzco –¿o soy demasiado optimista?– que reconoce algún desliz en la tramitación. ¡Uy!, perdona, Manolo, por pensar cosas feas, pero ¿cuánto tiempo necesitas? ¿Siete décadas, quizás?
“El hipódromo es una deuda casi personal con los vecinos”. ¿Con cuáles? Mis caballos están a buen recaudo en el coche y no necesitan instalaciones de alto starling (ya sé que a usted no le gusta decir las cosas en inglés, pero a mí sí; por presumir, ¿sabe?, como cierto concejal de épocas pretéritas). Intente cazar (con dobles) el interés de los afortunados jinetes con los de otros vecinos que son más de vacas, cabras y ovejas, así como los amantes de los fuegos artificiales.
Con respecto al campo de golf, leo que “no ha tirado la toalla”. Vaya con sumo tacto no sea que se le vire la tortilla como cuando hubo una solicitud de instalación de una superficie comercial en Los Potreros. ¿Se acuerda, no?
Y la guinda: Muestra usted total “predisposición de volver a ser cabeza de lista al Cabildo o ir a otra administración, pero siempre priorizando el municipio”. ¿Otra vez, don Manuel? ¿Y el compromiso para dedicar todo su tiempo y esfuerzo a Los Realejos? ¿Olvidó que lo escrito tiene memoria? ¿Por eso puso a Adolfo a su lado en la foto? Si en la actualidad, a lo sumo, está dos días por estos lares –las sesiones fotográficas, ya sabe–, ¿pretende que le sigamos pagando por un trabajo que no realiza? Me asombra que una persona tan seria como se menta sea capaz de engañar de tal guisa.
Sus vaivenes y desdobles solo son equiparables a los de mi otro admirado político: Casimiro Curbelo. Y como me gusta demostrar con hechos que lo que escribo debe poseer todo el fundamento posible, pongo a su disposición unas líneas de su última encíclica dominical para que compruebe que las concomitancias son cada vez más evidentes:
“La política es saber ceder y colaborar cuando es objetivamente razonable apoyar una iniciativa aunque la lidere o impulse otro grupo político”. Se refiere Curbelo a su andadura en el Parlamento de Canarias. Y ya sabemos cómo se las gasta en el Cabildo gomero. Como usted en la Villa de Viera con los grupos de la oposición. Sí, ya sé que me repito. Tantas veces como hagan falta para que este pueblo nuestro despierte del letargo en el que se halla sumido por los polvitos mágicos. Y sigo con las transformaciones de Casimiro en Teobaldo Power:
“Romper la capacidad de alcanzar consensos o perder la buena y necesaria costumbre de mostrarse dispuestos a la negociación son errores que la Cámara no puede permitirse. Los canarios no se merecen esto. Merecen que antepongamos sus inquietudes a los desvelos electorales de los partidos. Merecen que los grupos parlamentarios hablen menos de sí mismos y mucho más de la cosas que están en el día a día de la gente de la tierra”. Para enmarcar. Y si es con una foto de ustedes dos, al estilo de una buena yunta en esta próxima feria de ganado (si el hipódromo lo posibilita), mejor que mejor. La Consejería de Sanidad debe plantearse con urgencia la construcción de un buen hospital psiquiátrico. O siete, mejor.

miércoles, 25 de abril de 2018

Renuncio

Renuncio al nacimiento en la Casa de La Gorvorana. Es más, a todos los efectos habidos y por haber, yo no he nacido. No existo. No soy. No vivo. Atrás ha quedado un periodo glorioso en el que uno presumía de haber compartido la vivienda de ilustres moradores desde los tiempos de don Francisco de Gorvalán, pero con esto del ojo clínico a todo lo que se mueva me han puesto de patitas en la calle y perdido me hallo.
Renuncio a los estudios cursados en la escuela de La Longuera –la de los chicos– que regentaba don Andrés Carballo Real y de la que no pude salir como un hombre hecho y derecho porque el maestro me mandó al colegio San Agustín antes de obtener certificado (creo que de estudios primarios en aquella época) alguno que diera fe de mis nociones académicas y de mis aptitudes pedagógicas.
Renuncio a la etapa del colegio antes aludido (seis años de bachillerato, elemental y superior, y uno más del Preuniversitario, selectividad incluida), de los ejercicios espirituales y de las competiciones deportivas en diversas facetas, de los dos campamentos del la OJE (La Gomera y Zaragoza) y de las caminatas hasta la que era mi casa.
Renuncio al título de Maestro y al puesto conseguido, que permitió el acceso directo, en la promoción del Plan 1967, y a los años de docencia impartidos en La Montaña (Los Realejos), San Antonio (La Orotava), Toscal-Longuera  e IES Mencey Bencomo (Los Realejos).
Renuncio a cualquier otra titulación que pudiera tener, sin darme cuenta, o cursada sin interés (por ejemplo, en el Seminario) y cuyos diplomas acreditativos (licenciatura, doctorado u otros) pudieran estar revueltos en cualquier gaveta, en caso de que no hayan podido ir a la basura en algunas de las operaciones de limpieza que en todo hogar que se precie se llevan a cabo de vez en cuando.
Renuncio a los cargos ocupados en la etapa docente merced a la credencial que obtuve en la tómbola de la última fiesta celebrada en mi barrio, bien sea dirección, jefatura de estudios, secretaría o demás.
Renuncio a las presidencias u otros cargos directivos de asociaciones, federaciones, sociedades, partidos políticos, con especial énfasis en aquellos de carácter público de alguna trascendencia.
Renuncio a las etapas de rascar cuerdas por esos mundos sin arte ni beneficio, así como a los viajes que dichas actividades conllevaron. Lo siento por Valle de Taoro e Higa.
Renuncio a los cursos y jornadas habidas durante décadas, como también a trabajos realizados y charlas impartidas.
Renuncio a toda mi actividad literaria y periodística, que se resume en varios renglones cambados y en cuatro o cinco artículos que solo he leído yo.
Renuncio a mi hernia umbilical y operaciones de próstata y fémur. De igual forma, a los futuros viajes del Imserso (de los efectuados, que me quiten lo bailado).
No renuncio a mis cursos de Transistores, Radio y Televisión, de Afha-España, 1982, porque no me sirvieron para nada y porque ya perdí el soldador y el estaño.
No renuncio al hecho de haber sido el primer clasificado en la Competición Didáctica de actividades físico-deportivas, especialidad de atletismo, celebrada en Madrid en el año 1972. Ni tampoco el de haber ocupado idéntico puesto en las pruebas clasificatorias para aspirantes a la XXX promoción de la ya extinta IPS. Ni el de haber tenido el honor de ser el primero en la convocatoria de acceso a los cursos de doctorado del bienio 96-98 en el Departamento de Ciencias de la Información, en la Universidad de La Laguna (mis medios económicos no me posibilitaron ir a Wyoming, verbigracia).
Gracias a Cristina Cifuentes, a Asier Antona –palmero de Bilbao él– y otros tantos cuyo currículum se infló por mor de una borrasca atlántica. Me parece muy bien que no dimitan. Yo tampoco pienso hacerlo.
En fin, renuncio a tener currículum. No me busquen, pues los ‘don nadie’ no existen. Estoy missing, que es lo que se estila ahora. No valgo ni los consabidos cincuenta céntimos para los que sí son mucho en la vida.
Mañana, si es que encuentro el camino a La Corona, me tiraré a la bartola –qué mal suena– y lo mismo…
Váyanse a freír chuchangas, partida de machangos, que nadie me ha regalado nada. Y si lo que sienten, muy en el fondo, es envidia, pónganse a trabajar y a estudiar. Vayan para Fuerteventura. Allí buscan elementos para una campaña contra la invasión de ardillas. Aprovechen.

martes, 24 de abril de 2018

La mirada positiva (y 2)

Estaba cerca la cita electoral de 2011. Y “Los Realejos merece un cambio y mirar hacia adelante”. Fue el lema del candidato a la alcaldía por el PP. Quien obtuvo la mayoría absoluta (11 concejales) porque la debacle del PSOE (pasó de seis a tres en su representación municipal), junto al ya premonitorio descenso de Coalición Canaria, propició que el voto se decantara por la figura de Manuel Domínguez. Quien sostenía que “si los vecinos me dan su confianza dedicaré todo mi tiempo y mi esfuerzo a Los Realejos. Este es mi compromiso”. Era en aquel entonces diputado en el Congreso. Y aunque renunció al cargo madrileño, pronto olvidó que “lo escrito tiene memoria” y lo de dedicar todo su tiempo pasó a ser pura entelequia. Esperaban otras ocupaciones orgánicas e institucionales y las promesas volaron con el viento. En la actualidad, como es notorio, cualquier parecido con lo plasmado en la revista número 11 –de la que hoy nos ocupamos– es mera coincidencia. Si el alcalde releyera, como ha hecho un servidor, el pasaje de que “Los Realejos necesita de dedicación y de tiempo suficientes como para poder conducir el timón de un municipio”, a lo peor se olvidaría de inmediato... con otra de sus sesiones fotográficas.
“Todos los realejeros coincidimos en una cosa: nuestra primera preocupación y más importante tarea por resolver es combatir las preocupantes cifras del paro en nuestro pueblo”. Pues sí, muy ‘preocupado’ parecía el señor Domínguez cuando cifraba la población en 40.000 habitantes y unos 5.000 desempleados. El municipio, siete años después, ronda los 36.000 habitantes con unas cifras de paro todavía superior a las 4.000 personas. Si se ha disminuido cuatro millares el padrón municipal (se han traslado al Sur de la isla o a otros destinos en busca del sustento) y las cifras del desempleo solo lo han hecho en algo más de mil, mucho debe estar fallando. Aunque ahora don Manuel se escuda en que no es de su competencia tal menester. Y lo de “agilizar la inversión pública y privada para el mantenimiento, creación e implantación de nuevas empresas que reactiven la economía local y generen riqueza” parece que no ha surtido demasiado efecto. Se achacaba a los anteriores mandatarios la “huida de personas y empresas”, algo que (no olviden que la publicación aludida es de solo uno o dos meses  antes de las elecciones) en estos siete años que lleva de gobierno el Partido Popular no ha sabido atajar.
“Por una cripta en condiciones en La Montaña”, porque alguien se olvidó de aquel núcleo poblacional. Amén de pasos de peatones elevados (a petición de los vecinos, se aclara; muestra inequívoca de lo que entienden por participación ciudadana). ¿Se halla el tanatorio mentado ya en las debidas condiciones y se adapta a la normativa legal vigente? ¡Ah!, claro, del dicho al hecho.
“Por la Travesía del Pino transitan a diario muchos de sus vecinos. La carencia de acera y una escasa visibilidad lo convierten en un lugar de notable peligro. El PP propone proyectar finalmente una alternativa segura y viable para darle una solución”. Me alegro. Ahora está que da gusto verlo. A lo peor es que un concejal, con industria cercana, pasa solo en coche y no ve peligrar los tobillos.
“Muchos vecinos se sorprenden cuando descubren que hay determinados lugares en nuestro pueblo que carecen a día de hoy de alumbrado público. Seguiremos exigiendo unos servicios básicos para todos”. Y llegó la privatización. Y aumentaron los lugares de sombra. Eso, a peor la mejoría.
“Hemos exigido la apertura, de una vez por todas, de la Guardería Pública y una mayor presencia de los cuerpos de seguridad y vigilancia”. En Icod el Alto, concretamente. La guardería fue abierta hace un par de meses. Las velocidades son diferentes según donde se sitúe cada cual. Lo de la seguridad se ha conseguido con el aumento notable del número de policías. Ya saben que el 'despido' de Marrón ha posibilitado que se cubra íntegramente la plantilla.
El Vivero de Empresas, salta a la vista, ha generado tal cúmulo de actividad que… Ya está. Con los garbanzos de la gente yo no juego.
¿Una ludoteca en la zona de La Puntilla (La Longuera), la Casona de La Gorvorana…? “Corre, corre, que vienen las elecciones”. Si estás desconfiado, te presto la revista, por si la perdiste o la arrojaste a la basura.
Dar una solución al Callejón de los Cuartos. ¿Cuándo? Estamos en ello.
Propuestas en positivo: Casa de Agustín Espinosa, rehabilitación del Cine Viera, segunda piscina para todos, con baños accesibles y fisioterapeuta…
Reglamento de participación ciudadana: “El acceso a la información y la falta de respuesta por parte de los políticos en muchos casos causan malestar y desasosiego en quienes esperan de la administración una relación más cercana y directa. Los Realejos necesita un nuevo reglamento con el fin de abrirlo al conocimiento y a la participación de todos”. Y jamás se hizo la luz. Eso de que la gente hable y exponga pareceres escuece sobremanera. Menos mal que me queda el blog. Hasta que decidan expulsarme de La Corona.
Concluyo con el “derroche de publicidad” que El PP –insisto: año 2011– echaba en cara al gobierno de CC. Espero y deseo que ningún concejal del grupo de gobierno actual se vea obligado a repasar el contenido de las dos revistas que dieron lugar a los artículos de ayer y hoy. No es mi intención hacerles pasar por tarea tan ardua, porque, a lo peor, alguno despierta y descubre que el camino de rosas que Manuel Domínguez vende en cada comparecencia no es tal. Y lo mismo se asusta.
En resumen, desde ha bastante han sido excelentes vendedores de humo. Sigo a la espera de que se equivoquen en el envasado y pongan dentro del recipiente aromas extraños que puedan provocar alergias en un pueblo que aún sigue creyendo en pajaritos preñados.

lunes, 23 de abril de 2018

La mirada positiva

Estuve la pasada semana en Fuerteventura. Caminando poco, haciendo unas cuantas fotos y comiendo mucho. Estos viajes del Imserso, a través de Mundiplan, y gracias a lo económico que salen los billetes en avión, permiten semejantes sacrificios. No te rías que ya llegarás a mis años.
Unos días antes de recalar en Caleta de Fuste para la desconexión oportuna (en Facebook colgaré unas instantáneas para darte algo de envidia), estuve limpiando unas gavetas en casa. La mayoría de papeles acabó en el contenedor. Pero me tropecé con dos revistas, en las que destacaba el color azul (ahí tienes la primera de ellas), publicadas por el PP realejero en los años 2010 y 2011 (números 7 y 8), de las que entresaqué algunas notas.
Aclarar de antemano que en ese tiempo Manuel Domínguez era concejal en la oposición y gobernaba, o daba sus últimos coletazos, Coalición Canaria (de la mano de Oswaldo Amaro), que había roto el pacto que mantenía con el PSOE. Fue la época en la que CC se peleó con todo el mundo, incluso entre ellos, y los navajazos dieron lugar a que años después quedara reducida a la mínima expresión. Hecho del que se benefició (a río revuelto, ganancia de pescadores) el grupo que ahora rige los destinos municipales merced a la fuga de votos que se produjo.
De los vaivenes de nuestro alcalde, de sus idas y venidas, de lo que afirma en el Consistorio y niega en el Cabildo, de sus desdobles y otras cuitas ya hemos dado debida cuenta en este blog. Y en las páginas de la revista de marras, y con las perspectivas del tiempo transcurrido a nuestro favor, ya se intuyen ciertas derivas. Paso por alto algunos aspectos, como el deterioro de nuestros senderos de la costa (como si ahora estuvieran ‘flemantes’, que diría una parienta), y me centro en los más significativos. Cada uno de ellos es merecedor del reproche conveniente, del comentario de rigor, del toque de atención a quienes olvidaron llevar a la práctica lo que con tanta facilidad demandaron en el pasado. Y que requirieron preguntas, mociones y propuestas de los grupos de la oposición, que recibieron el consabido “estamos en ello” como justificación a idéntica desidia a la que se ponía en solfa. Pero como entiendo que mis estimados lectores  son los suficientemente inteligentes, y con currículum acreditado, sabrán comparar el antes opositor y el ahora figurín. Vamos, pues, con la número 7 (año 2010).
En relación al Parque de San Agustín: “Para garantizar un buen mantenimiento y conservación, creemos indispensable colocar un vallado exterior para evitar los accesos nocturnos y posibles actos vandálicos que deterioren su mobiliario y vegetación”. Kein Kommentar.
Cine Viera, en Realejo Alto: “Es inevitable preguntarse si quien gobierna este municipio habrá hecho todos los esfuerzos posibles para devolverlo a la vida cultural de Los Realejos y al disfrute de sus vecinos”. No comment.
Acerca de la importancia del Plan General de Ordenación Urbana –que continúa sin ser aprobado a pesar de los muchos años de gobierno popular– se argumentaba: “De él depende el desarrollo futuro de nuestro pueblo […] para que los empresarios tengan garantías para invertir y crear empleo en el municipio. Es un documento que nos afecta a todos y debe tener la aprobación de todos”. Aucun commentaire.
No se acepta una sugerencia de los concejales de la oposición (están ninguneados hasta decir basta, en un ejercicio de cinismo y prepotencia sin límites) y rescato estas guindas: “Abrir todos los cauces de comunicación posibles entre nosotros, para conocer de cerca tus sugerencias y tus ideas para el municipio, tus comentarios y opiniones sobre cualquier asunto y hacernos eco de tus quejas y reclamaciones”. Lo que ha quedado reducido al Facebook del alcalde (al decir de cierta concejala) y de nos gustarle, te elimina la observación. Sem comentários.
Al amigo Oswaldo Hernández Báez le va a encantar esta pincelada de Los Cuartos: “Nuestro gobierno municipal no ha realizado todas las gestiones necesarias para poder acometer un ambicioso proyecto de saneamiento y rehabilitación en una de las principales vías de entrada a Los Realejos”. Saltan a la vista las mejoras conseguidas por el PP en dos mandatos. Nessun commento.
Y para concluir este somero repaso, unos breves:
“Tras el abandono forzoso por riesgo de desplome reclamamos que la sede de ‘La Filarmónica’ continúe estando en Realejo Bajo, concretamente en la Casa de la Parra”.
“La urgencia de tener este Plan (de Emergencias, el de Marrón) aprobado de inmediato para hacerlo público y presentarlo a los vecinos para su conocimiento”.
Con una fotografía de las instalaciones de El Campo (el fallido Mercadona de cierto empresario), en la urbanización Los Potreros, se “sigue insistiendo al gobierno local para que cobre un mejor aspecto y esté mejor atendida”.
“Desde el PP pedimos que se cubra al completo la plantilla prevista (de la policía local) y se cumpla con lo estimado en el presupuesto”.
Como todos ustedes conocen, el grupo actual de gobierno presume y se jacta de cuentas saneadas y superávit a porrillo. Desliguen las obras importantes que acomete el Cabildo (ese maldito organismo que nos tiene olvidados) en el pueblo, el mantenimiento de los servicios a los que está obligado, entrega de metopas a quienes destacan en cualquier disciplina por méritos propios, inundación en cuanto foro hallen a su alcance de sesiones fotográficas, decremento poblacional preocupante (que se toma como un logro al disminuir, lógicamente, el número de parados) y… por arte de magia ya Los Realejos está en el mapa. Manda trillos. Mañana más.

viernes, 13 de abril de 2018

Rebujato

Cuando redacto estas líneas –mediodía del jueves 12– estoy turbio perdido. No sé si es que me dura el cabreo que cogí la noche anterior cuando Cristiano Ronaldo me echó a perder una décima que tenía preparada (el Madrid perdía en ese entonces por la misma diferencia de goles que traía de renta desde Italia) para que los del Barcelona no pensaran que solo se las dedico a ellos, o que necesito unas vacaciones urgentes porque el estrés me sobrepasa. Así que no respondo del presente, y si al final concluyes que este rebujato no vale un céntimo no seré yo quien te quite la razón.
Comienzo con la promesa (si quieres también te lo puedo jurar) de que no he cursado máster alguno en mi vida. Si por un casual localizaras en mi currículum reseña al respecto, será porque alguien del PP quiere fastidiarme. Sí, no te creas que voy descarriado porque más de uno me tiene enfilado. Y han cursado órdenes a sus voceros para que pongan el ventilador en marcha. Como a los realejeros, eso manifiesta el alcalde, no nos afecta la depuradora comarcal, ve tú a saber si los miasmas deletéreos que se propagan por el aire no nos producen escozores mentales. Y no son piojos. ¿O sí?
“El PP niega que haya decidido que Cifuentes tenga que dimitir”. La mayoría de medios de comunicación se hicieron eco del asunto. Por consiguiente, que diría Felipe, adiós, Cristina, adiós. Tú, mejor que nadie, sabes que esa es la antesala de la decisión final. No me extrañaría que pueda quedar desfasado y cuando leas este párrafo –a partir del minuto uno del día 13– ya le hayan agradecido a la presidenta de la Comunidad de Madrid los servicios prestados, con el aviso de que pase por Génova a firmar el finiquito. Cómo se nos chafa la vida por un máster de nada.
En la vecina ciudad portuense siguen revueltas las aguas del Lago. Y no es que la mancha canela que observamos en Punta Brava se haya trasladado hacia el naciente. Sigue coleando lo del robo de cierto material. Leí que han sido varios los expedientes que en estos últimos tiempos se han abierto en Pamarsa. Desde aquel lejano 30 de marzo de 1989, la sociedad mixta Parque Marítimo, S.A. (y desde 1992, Empresa Pública Municipal) se ha visto envuelta en demasiadas controversias. Y bastante turbias. Pero como el alcalde, Lope Afonso, no demasiado popular pero destacado dirigente del PP, es de la línea del laissez faire, laissez passer (dejen hacer, dejen pasar), me temo que una vez más –y van…– no habrá cargo político que asuma cualquier tipo de responsabilidad. Y como en CC están más preocupados en posicionarse de cara a mayo de 2019, ¿qué importa una raya más para un tigre? A vivir, que son dos días.
Como Mahou San Miguel ha adquirido algo más de la mitad de las acciones de la empresa que comercializa una botella (con agua) que se puede ver cada semana sobre una mesa ubicada en los aledaños del Barranco de San Felipe, me imagino que si cambia la bebida a cerveza, se incrementarán los grados dialécticos. Es un mero suponer.
Dijo mi alcalde que “ya estaba bien de shows mediáticos”. Y no se refería a él mismo mismamente, como seguro que tú pensaste, y yo también. No, era por una reunión de alcaldes en la Isla Baja. Y al día siguiente, para demostrar que él no se dedica a esas cuestiones, se fue a Realejo Bajo –en la foto de Diario de Avisos tienes la muestra– para convertirse en protagonista de “Érase 2018: La Ciudad del Cuento y la Palabra”. Porque los que aparecen en la instantánea deben ser todos unos excelentes cuentacuentos. Bueno, lo son, y a los hechos me remito. Los que se curran la organización previa y luego ponen en escena el amplísimo elenco de actividades debían estar en el lado desde donde el fotógrafo disparó. Espero que otro ilustre, Antonio Alarcó, recapacite un fisco antes de lanzarse a la aventura de criticar a CC por, eso sostiene, gobernar desde las redes sociales. Aunque, pensándolo mejor, estos postureos deben ser “un ejercicio de participación ciudadana colectiva”, en palabras de cierta concejala. ¡Ah!, me reitero en lo argumentado en ocasiones anteriores: yo suprimiría lo de ciudad y abogaría por villa. El éxito, como en años precedentes, está más que garantizado. Prueben en 2019 a no sacarse la foto y verán que sigo teniendo razón. ¿Qué escribiste? Ni se te ocurra volver a hacerlo; esa acción del posado es, es, es…
A perdonar si no he sabido reburujar adecuadamente.

jueves, 12 de abril de 2018

¡Cuánta coherencia!

La fotografía constituyó, según el PP, todo un hito informativo. En la misma, Adolfo González, primer teniente de alcalde del ayuntamiento de la Villa de Los Realejos, y presidente de la comisión insular de cultura del Partido Popular tinerfeño, junto al diputado regional Agustín Hernández, muestran una lámina en la que podemos observar la fachada de la casa natal de Viera y Clavijo. Se encuentran ambos en los exteriores de la sede del Parlamento, en Teobaldo Power, y simbolizan la materialización de una propuesta sugerida por la precitada comisión y elevada al órgano legislativo a través de una proposición no de ley (PNL) para promover la adquisición de dicha casa, declarada monumento histórico de Canarias.
En la misma se insta al gobierno regional a que una vez adquirida la propiedad se proceda a la redacción y ejecución de sendos proyectos de rehabilitación integral y puesta en uso del inmueble como centro cultural, de estudio y divulgación de la figura de Viera y Clavijo. El acuerdo obtuvo el voto unánime de la cámara. Y es que los asuntos donde prima el sentido común, las ideologías quedan al margen. Al menos eso entendemos los que desde la distancia contemplamos espectáculos nada gratificantes cada vez que sus señorías –de aquí y de allá– ocupan sus escaños para ponerse a discutir como en cualquier patio de colegio que se precie.
Como el asunto viene coleando desde la década de los ochenta del pasado siglo, cuando leí el particular quise entrar en estado de ánimo positivo –por enésima vez– y llevo unas semanas pensando si esta vez va a ser la definitiva. Lo malo es que después me pongo a ver la tele y agarro cada depresión...
Hace un par de días se debatió en el Senado otra moción –presentada por la popular Isabel García Luis– para instar al Gobierno (nacional) a contribuir al impulso del plan de difusión, nacional e internacional, de la figura de don José de Viera y Clavijo, eminente historiador, escritor y científico ilustrado, máximo exponente de las letras en el archipiélago y una figura de cohesión cultural para todas las islas. Recibió, asimismo, apoyo unánime.
Cuando anteayer la senadora publicó este tema en las redes sociales, obvió que en dicha sesión parlamentaria la también senadora Olivia Delgado había defendido una propuesta de adición por la que solicitaba que hubiese apoyo económico del Ejecutivo de Rajoy para la compra de lo que hoy sigue siendo propiedad privada. Y que fue rechazada porque el PP estimó que no debía apoyarla.
Entiende este aprendiz de casi todo, y así se lo hice saber a la senadora icodense en un comentario, que se ha perdido una magnífica oportunidad para sumar esfuerzos. Porque nunca está de más la colaboración de las instituciones, y si las cargas se reparten, mayor facilidad para la adquisición de esa casa por la que llevamos esperando bastantes décadas. Pensarían los populares de allá que no tocaba, que con el apoyo al plan de difusión era suficiente y corresponde seguir esperando, algo a lo que los realejeros estamos acostumbrados, casi resignados. Y otros ejemplos significativos podrían consignarse.
Parece lógico que si se cuenta con una sede física (museo, centro cultural o como quieran denominarlo), todos las posibles actividades a desarrollar disfrutarían del soporte adecuado y gozarían, en suma, de mucho mayor crédito y fundamento.
Pero debo estar equivocado porque no se me contestó a la simple pregunta de si no era más fácil aceptar el añadido antes de cerrar la puerta de manera tan brusca. Si esta es la coherencia del PP de aquí con el allá, guárdenme un cachorro. A no ser que mi alcalde haya decidido no aceptar regalos y adquirir (como hizo con su título) la edificación con el superávit municipal. Porque no quisiera pensar que doña Isabel y él no hayan sido capaces de vender nuestros encantos a la cúpula nacional. Claro que si esto lo uno al arranque habido con el afer de la depuradora, hasta los ateos nos ponemos a hacer cruces.
Por una mísera contribución hubiese tenido Mariano la oportunidad de venirse al pueblo para lanzarse en parapente o disfrutar, como hace en Amadores, de un espléndido baño en El Socorro. Son detalles que el Partido Popular, muy en horas bajas, debería cuidar. Pero en su empeño de marcar diferencias con Madrid, flaco favor se están haciendo por estos lares. Lo compruebo cada vez que inserto en el blog cualquier comentario relacionado con el equipo de gobierno. Por el número de visitas me da que el pueblo despierta de su profundo letargo. Mi alcalde está jugando con fuego e intentado minimizar los efectos colaterales. Pero ayer me paró un amigo por unas de las tantas avenidas del colesterol, y me preguntó que era eso de la Peña Los Roques. Se lo expliqué con sumo gusto, claro. Incluso le conté que el 26 de los corrientes nos volvemos a ver.
En los primeros días de este mes tuve la oportunidad de entablar amena charla con alguien que conoce muy bien por dentro la administración realejera. Y echaba en falta planificaciones a medio y largo plazo. También en la faceta cultural. Donde se va, me señala, a salto de mata. Así que, estimados vecinos, sigan tranquilos que cualquier tarde de estas nos enteramos de que han aprobado otra propuesta para adquirir la casa de Agustín Espinosa. Y que el Centro de Interpretación de los molinos de Realejo Bajo será una realidad. Y de que el Cine Viera pasará a ser un verdadero auditorio. Y de que… Hasta luego, me está llamando mi mujer.

miércoles, 11 de abril de 2018

96º aniversario

Allí estuvimos en horas del mediodía del pasado domingo (8 de abril). Y se palpaba ilusión. Aspecto que estuvo perdido durante muchos años. Había bastado unos cepillos y bastantes ganas para la metamorfosis. En el techo, las huellas del abandono se dibujaban aún. Pero ya se impermeabilizó la azotea, me indican. Y en las paredes se observan hendiduras para nuevas canalizaciones de luz y agua. El mueble biblioteca de la entrada ya presentaba aspecto diferente a como lo pudimos contemplar el pasado mes de enero. En fin, se vuelve a empujar en la dirección adecuada.
Antes de dar buena cuenta de la surtida muestra gastronómica que sobre las mesas habían depositado los organizadores, hizo uso de la palabra el señor presidente, Domingo García, para agradecer la presencia de la nutrida concurrencia y hacer un llamamiento a la colaboración, encareciendo el aspecto de la captación de socios, razón de ser de la Sociedad Valle de Taoro. En representación del ayuntamiento portuense, el concejal del barrio, Pedro González, animó a los presentes a seguir en la senda iniciada hace unos meses para intentar superar el tremendo bache habido y destacando los valores que siempre han distinguido este señero Casino, al que ni ideologías, ni siquiera la mal denominada guerra civil, han podido cortar la trayectoria de una entidad que se encamina decidida al centenario. Al tiempo, animó a la directiva a que soliciten del consistorio toda la ayuda necesaria para que regrese la actividad cultural a sus dependencias y vuelva a ser el referente que siempre fue en el entorno. Este aprendiz de cronista espera que el olvido no haga acto de presencia.
Mientras en los platos iba disminuyendo el volumen de sus contenidos y se inició el riego de los gaznates, las conversas de rigor, que en todo ágape que se precie son característica destacada, afloraron. Se amontonaron recuerdos de años idos, de épocas de esplendor, pero, asimismo, de desidias y abandonos. Porque es menester recordar pasajes de tinieblas, aunque sea para no repetirlos.
Los cuadros de los presidentes colgados en la pared del poniente daban fe del camino recorrido. Hasta ellos requieren un buen remozado. Amén de alguna ausencia –otra broma distendida para uno de ellos allí presente–, parece conveniente establecer criterios de uniformidad a la hora del recordatorio de sus periodos de mandato.
Y en más de una ocasión surgió, entre las muchas contingencias que se abren ante la nueva singladura, la posibilidad de que fuese una mujer –tradicionalmente soslayada su presencia en estas nueve décadas– la que ocupase la presidencia, amén de otros cargos en el equipo de gobierno, cuando en el año 2022 traspasemos el umbral que nos conducirá a dar los primeros pasos en la segunda centuria. Sería muestra inequívoca de un gran adelanto social y el retrato de una normalización estatutaria. Por cierto, que habrá que dar un buen repaso a los mismos (Estatutos, o Reglamento, como lo denominaban aquellos que pusieron los cimientos) por si han quedado desfasados.
A los postres –¿se dice así, no?–, una parranda (¿Los almendros?), que viene furrungueando (sigamos poniendo de moda los canarismos) cuerdas desde hace unos meses en el barrio, amenizó la velada con varios temas, que en más de una ocasión fueron acompañados con los coros de rigor por los asistentes al acto. También el cumpleaños feliz, por supuesto.
Las transformaciones no surgen de manera espontánea. Tampoco se fabrican de la noche a la mañana. Es menester paciencia. Mucho tiempo y arrimar el hombro. Cada cual en lo que pueda aportar. Si me dan una cuchara de albañil lo mismo hago una muy fuerte chapuza. Pero aquí estoy con lo que creo pueda ser mi grano. Dar a conocer cómo otros cogen la picareta, pasan la fregona o hacen una tortilla para matar un jilorio. Y pasito a pasito, despacito pero sin pausa, seguiremos marcado hitos, colocando mojones en el itinerario.
Hagamos honor y brindemos por quienes tuvieron la feliz idea aquel sábado, 8 de abril de 1922, en que se dio el pistoletazo de salida. En la actualidad los entretenimientos son muchos, pero debemos animar a quienes han decidido no seguir parados viéndolas venir. Corramos tupido velo a la negra etapa reciente y miremos el futuro con optimismo. Si todos arrimamos el hombro, la nave seguirá bogando.

martes, 10 de abril de 2018

El buen periodismo

Hoy me apetece dividir el presente en dos partes claramente diferenciadas. La primera, distendida. Porque ya se encarga la vida de darte palos. Y, no lo olvidemos, porque en este blog se vierten artículos de opinión, no sujetos a formatos estereotipados, y su responsable, un servidor, tiene, como en cualquier otra faceta, momentos lúcidos y otros no tanto; amén de no querer sujetarme a reglas estrictas. La segunda, seria, de enjundia, que será leída de manera distendida, reflexiva, tras la sonrisa eso espero─ que esbozaste con dos paradigmas de cómo eternizar la política.
La fotografía que ilustra este post nos muestra al incombustible Antonio Castro, palmero él, dando prisas en Teobaldo Power porque dejó al fuego unos ñames de Los Sauces. Representa nuestro hombre el prototipo de político profesional, ese ser dotado de unas características especiales que le hacen valer para todo lo que le echen. Y, tras un periplo más dilatado que la navegación del Juan Sebastián de Elcano, ahí sigue con su pachorra, cobrando bien, trabajando poco y pensando ya en las próximas. ¿Que si repite? Ni lo pongas en duda. Lo tiene más seguro él que Enrique en mi pueblo.
“La Gomera puede ser 100% renovable en 2030”. Eso sostienen unos investigadores; extranjeros, claro. Y como deben desconocer el modus operandi que se estila por aquellos lares, me atrevo a sugerirles con toda humildad que incluyan en el paquete al mismísimo Casimiro. De lo contrario, no le auguro mucho éxito a la propuesta, que podría tener menos recorrido que las piscinas de Vallehermoso, entre tantos y tantos ejemplos a citar.
Y vamos ahora con lo serio:
No pasa el gremio por sus mejores momentos. Está la profesión de capa caída. La crisis ha causado profunda mella mucho más allá del bolsillo. Y los medios se deben demasiado. Se les ve el plumero. Se ha sucumbido ante los denominados poderes fácticos. Poderoso caballero es don dinero. Unos billetes sobre, o bajo, la mesa marcan pautas y dictan procederes. Y el avance incontenible de las redes sociales ha provocado demasiada liviandad a la hora de seleccionar contenidos. Los apegos son tan evidentes que los preceptos constitucionales hacen aguas por doquier.
Leí hace unos días unas interesantes reflexiones que ponía sobre el tapete el cordobés Gervasio Sánchez, uno de los reporteros gráficos más prestigiosos del momento. Rescato unos fragmentos de sus respuestas en la entrevista de marras:
“Los medios de comunicación, en su inmensa mayoría, han renunciado a algo que es básico para la sociedad: el buen periodismo”. A perdonar, pues, la copia del titular. “Con esta carencia, la sociedad está condenada a la manipulación y al fracaso”. Continúa con unas reflexiones acerca de cómo los medios de comunicación son capaces de olvidar las tragedias en el continente africano, o de cómo damos por finiquitado un conflicto bélico cuando se firma un papel, mientras las consecuencias perduran pero son silenciadas por mor de nuevos intereses supuestamente informativos. “Al final se ha renunciado al periodismo de investigación, implementándose una serie de relaciones impúdicas con los poderes fácticos. A día de hoy, la mayoría de los medios se arruga ante las presiones, lo que provoca que solo cubras lo que rodea al poder”.
Todos los medios, audiovisuales o impresos, las están pasando canutas porque la tarta de la publicidad no da para tanto comensal. Las instituciones públicas disponen de sus correspondientes gabinetes de prensa. Y ya se pueden imaginar qué contenidos inundarán a diario las pertinentes redacciones. Cuyas plantillas se reducen al mínimo –y vete a saber si cobran los que aún quedan en nómina–, con lo que salir a la calle, patear y rastrear los posibles focos de atención se ha convertido en imposible. Y si lo hacen, van directamente a la dirección que el jefe ha señalado. Las ruedas de prensa se han convertido en el clásico dictado de la escuela de antaño. En muchas, ni preguntas. Y si me vas a rebatir el planteamiento porque la televisión autonómica, por ejemplo, dispone de personal en todas las islas, te derivo a que visiones todos los informativos del día que tú elijas. Y anótame en un papel la cantidad de boberías e idioteces que conforman el sumario. En conclusión: pobreza absoluta.
¿Qué nos queda? Honrosas excepciones en alguna tele local y aquellos que no le debemos nada a nadie y perdemos tiempo escribiendo boberías en un blog, verbigracia. Menos mal que ya tengo apalabrada la jefatura de prensa (a dedo, faltaría más) en el Cabildo de La Gomera. Buen sueldo, coche oficial, alojamiento y manutención y curso de silbo gratuito. Incluye, asimismo, formar parte de las expediciones a todas las ferias. No llores, haber hecho un máster como yo.

lunes, 9 de abril de 2018

Estación depuradora comarcal

El grupo municipal socialista presentó una moción en la última sesión plenaria del ayuntamiento realejero para instar al Gobierno de España a que declarara la nueva estación depuradora de aguas residuales para el Valle de La Orotava (EDAR) como obra de interés general. La actual, ubicada en Punta Brava, justo al lado del Hotel Maritim, como todos sabemos, ya da sus últimos coletazos (tras las muchas peripecias habidas en el pasado) y en unos pocos años quedará completamente obsoleta, no solo por sus dimensiones y capacidad, sino por el avance de las nuevas tecnologías al respecto. Para la nueva, cuyo importe rondaría los 17 millones de euros, el Plan Hidrológico de Tenerife contempla el suelo necesario, calificado como rústico de protección de infraestructuras hidráulicas, completamente disponible y abarca la superficie de la actual junto a los terrenos aledaños, desde el costado norte de donde se ubica el campo de béisbol, para entendernos y situarnos.
Mientras los consistorios villero y portuense adoptan acuerdo UNÁNIME para elevar tal solicitud –la trascendencia e importancia del tratamiento de las aguas (enormes cantidades de metros cúbicos van al subsuelo, cuando no directamente a la mar) no podía esperar otra respuesta de las corporaciones (incluidos los concejales del PP)–, el nuestro, el de la Muy Noble e Histórica Villa de Viera, por obra y gracia de los ‘tres mosqueteros’ que ilustran el encabezado de este artículo de opinión (el resto del equipo de gobierno va detrás sin decir ni pío), en otro arranque de prepotencia y soberbia, decide que no toca debatir el asunto. “Es un tema que no nos afecta”, se descuelga el señor alcalde en otra demostración de que este PP, el de aquí, es diferente al PP de allá, el nacional. Cinismo e impudor a la enésina, o más. Y como estamos escribiendo de asuntos que pueden producir malos olores si no se asisten adecuadamente, permítame usted, don Manuel Domínguez, que le espete: C´est la merde!
Ya tuve la oportunidad, tiempo atrás, de escribir otros dos comentarios acerca de sus arrancadas plenarias. Esas que demuestran que Los Realejos no se merece un alcalde que cobra, y bien, por estar más fuera que dentro (ya lo tenemos calado con sus sesiones fotográficas semanales) y al que le está quedando muy ancho el cargo con las salidas de tono, cuando no desprecio absoluto hacia quienes son tan representantes del pueblo como lo pueda ser usted, por mor de una mayoría absoluta (prestada por la debacle de Coalición Canaria) que se le subió a la cabeza (y como la suele tener en otro lado, deriva absoluta). Aquí les dejo los enlaces, por si alguno necesita recordar cualquier aspecto:
Sus tics le delatan de manera significativa. Dijo, no ha tanto, que no se tenía que definir en asuntos de índole internacional. Tampoco es la primera vez que suelta la lindeza de que en cuestiones de Madrid (como si no acudiese a la capital, en su calidad de vocal de la ejecutiva nacional, cada tres por dos para aplaudir con las orejas a Cristina Cifuentes, verbigracia) no debe posicionarse. Ahora baja otro escalón para deleitarnos con la no afección de los desechos de treinta y seis mil finales de los aparatos digestivo y urinario. O en román paladino, que cagadas y meadas (con los aditivos de rigor y efectos colaterales subyacentes) de toda la población de nuestro municipio le importan un pimiento, que ya nos encargaremos en un futuro de enviar la porquería por correo certificado, eso sí, sin acuse de recibo. Estos morros suyos no son los que brinda en las asociaciones de mayores cuando organiza el tenderete de turno. ¡Ah!, las dos caras.
¿Está en sus cabales o la cabeza comienza con las descompensaciones surgidas de su permanente desdoble de personalidad? ¿En su calidad de presidente insular ya llamó la atención a sus concejales en Puerto de la Cruz y La Orotava por llevar la contraria en los flujos migratorios de sustancias de color marrón (qué casualidad)? ¿Cómo va a vender ahora esta disparidad de criterios? O, a contrario sensu, ¿ya le tiró de las orejas Lope Afonso, como superior jerárquico en el organigrama regional popular, por su salida de tono, máxime cuando la mierda se la va a tragar él (perdón por el acento tan directo, pero enormemente gráfico)? ¿Se acuerda cuando hizo caso omiso a otra propuesta relacionada con el 8 de marzo y luego se fue a La Orotava a sacarse una foto en la escalera de acceso al ayuntamiento para firmar un manifiesto, dentro de la Red de Municipios por la Igualdad, en el que, entre otros aspectos, se contempla lo de “optimizar recursos” y “mutuo asesoramiento”? Es usted falso de toda falsedad. Ni siquiera puedo perdonarle, o disculparle, en esta oportunidad la enfermedad que padece por sus linderos de naciente (La Carajita) y poniente (Barranco de Ruiz). Como mi alcalde que es, me veo en la obligación de reprocharle el que me haya utilizado para demostrar a los vecinos que somos un pueblo insolidario y mal avenido. Y de eso nada. Los realejeros somos nobles y participamos en las causas que requieren compromiso, a pesar de contar con un equipo de gobierno al que cada vez se le sube más el ego, engordado a su imagen y semejanza.
Estos contenidos de especial trascendencia son los que no se comunican. Para ello no se ponen en marcha los medios de comunicación que tan bien utilizan y dominan para sus campañas de venta de humo en frascos pequeños. Pues quiero que sepa una cosa. Desde ya estoy solicitando a los amigos que compartan y difundan el contenido de la presente. Por redes sociales y en la conversa del bar de la esquina. Porque usted, en mi nombre, no puede seguir campando a sus anchas, tomando decisiones que ponen en entredicho mi relación con los familiares que habitan en este maravilloso Valle de la Orotava. Lo voy a contar a todo aquel con el que me tropiece en los días venideros, en la piscina municipal y en los kilómetros que pueda patear cada mañana. Me va a tener a su lado en aquellas iniciativas que redunden en nuestra calidad de mi vida, pero va a tropezar con una pared en decisiones como esta que nos concita hoy en el post bloguero. Voy a etiquetar (ya sabe, y si no se lo digo, que el enlace –ya sé que utiliza link por sus antecedentes anglosajones; yo soy más platanero– a Facebook y Twitter es automático) a los concejales de la oposición por dos motivos fundamentales: Se merecen apoyo ante tanto desagravio institucional, de una parte, y alcanzaremos un mayor número de lectores que, a buen seguro, despertarán de ese letargo en el que siguen sumidos por sus cantos de sirena, de otra.
Ya saben que no es mi estilo el autobombo, pero en este, sin que sirva de precedente, los animo a que hagan todo lo posible para difundir esta ignominia por cuanto medio tengan a su alcance. Aunque sea leyéndolo en voz alta en la azotea de la casa. Favor que agradeceré eternamente. Y saben los seguidores jóvenes que aún existe un colectivo bastante amplio, un sector mayor de la población, al que debemos informar. Es nuestra obligación como ciudadanos comprometidos. Que mañana nadie nos espete que ni en nuestras idas al baño somos copartícipes. Y que arriba remitimos los paquetes con nocturnidad y alevosía.
Turbio argumento, Manolo. Te juro que iba a terminar con un expresivo la has cagado, pero lo dejaré, por si se tercia, para otra ocasión. Atentamente.

viernes, 6 de abril de 2018

Organizo máster

No creas que me hizo falta pensarlo mucho. Bastaron unos intercambios con diversas universidades para decidirme a dar el paso. Es verdad que las norteamericanas me concedieron todo tipo de facilidades a la hora de acreditar la validez académica del curso. Y por una había que decantarse.
Así que una vez solventados estos pequeños detalles, me hallo en condiciones de afirmar con total rotundidad que el próximo 3 de mayo –día elegido a conciencia porque la noticia bien merece una traca– se abrirá el plazo de matrícula para el máster que llevará por título: “Todo lo que usted debe saber de la venta al por mayor de humo de colores envasado en minúsculo recipiente de cuello recogido y fabricado en cristal de Bohemia, al igual que los posibles efectos colaterales derivados del mal uso como sustancia aromática”.
Puede que la denominación sea algo extensa –rimbombante, quizás–, pero los 50 créditos bien merecen que uno sea escrupuloso hasta en esos aparentes nimios detalles. Ya saben que lo normal son 30, como en el de cierta presidenta, mas en un alarde de compromiso y buena voluntad, he conseguido marcar un hito sin parangón en la historia del pueblo. Porque la realización del mismo se llevará a cabo en La Gorvorana. Sí, y esa es otra noticia novedosa, la Casona ya contará con unas dependencias felizmente remozadas, merced a ese gran proyecto de los alumnos que cursan sus estudios en la sede orotavense de la Universidad Europea y con la inestimable participación económica de una empresa estadounidense (de Cheyenne, exactamente) dedicada a la comercialización de carne de búfalo aderezada con aguas termales de los géiseres de Yellowstone.
Tengo el honor de participarles que seré el director del mismo y contaré en el elenco de profesores, surtido y selecto, con prestigiosos catedráticos procedentes de los más diversos sectores de la administración, tanto pública como privada. El precio del máster en cuestión será un poco elevado. Aunque el desembolso –se permite el fraccionamiento en cómodos plazos a convenir– puede significar un hándicap inicial (85.000 dólares, más o menos el sueldo anual de cualquier asesor sin cualificación alguna), no olvidemos la trascendencia y repercusión que para todo currículo supondrá esgrimir esta titulación. Máxime cuando irá acompañada de una certificación high quality, que abrirá puertas (y todo tipo de ventanillos).
Ahora bien (y hagamos hincapié en estas salvedades que otros no se han atrevido a plasmar por escrito y que nosotros, en un afán de transparencia absoluta, dejamos sentado de antemano), si usted no puede inscribirse en el plazo estipulado (el inicio ya se indicó, y la finalización será el Lunes de Remedios), no se preocupe en absoluto; no se coma el coco ni busque alguien quien le pueda hacer el favor de rellenar la inscripción. Basta un mensaje (el número de mi móvil se lo daré por privado) y mostrar el deseo de querer conseguir el anhelado diploma; con ello tendremos garantías suficientes. Prima siempre el factor humano.
Imaginemos que una vez inscrito le surjan problemas y le sea imposible la asistencia a las clases (no olvidemos su carácter presencial), tranquilidad absoluta. Toda norma tiene su excepción y usted podrá ser incluido en cualquiera de los casos raros que acontecen en toda faceta de la vida. Somos nosotros los que nos adaptamos a sus contingencias, siempre y cuando, en esto no hay posibilidad de excusa alguna (condición sine qua non), el abono de las tasas se haya hecho efectivo. Ya arbitraremos la fórmula que mejor le convenga y concuerde con sus intereses. Aun en el peor de los supuestos, sí que parecería adecuado que al menos una vez asomara el hocico (a perdonar la expresión coloquial, que viene a significar una muestra más del toque familiar que siempre damos a nuestras iniciativas) por alguna de las aulas. Siempre queda bonito saludar a los que tienen la tremenda suerte de acudir a todas las sesiones lectivas por no sufrir los problemas e inconvenientes de su estresada agenda.
Dejamos sentado, asimismo, que si por un casual –algo improbable, pero uno nunca sabe las vueltas que da la vida– un alumno que hubiese satisfecho sus obligaciones de pago (aunque lo haya hecho fuera de plazo, no hay que ser tan quisquilloso) no pudiera o pudiese acudir a la hora que el tribunal haya especificado para la realización de cualquier prueba o examen, seríamos pésimos profesores si no tuviésemos en consideración tales nimiedades. Por cualquiera de los canales que nos brindan las nuevas tecnologías, el afectado se pone en contacto con el docente y este, sin compromiso alguno, le remite la documentación pertinente, incluso con varios días de antelación, para que en la tranquilidad del hogar, y teniendo a mano, todo el material que considere oportuno para la consulta de rigor, quede testimonio escrito de que el control se ha superado. Sobre todo por lo que pueda ocurrir en el futuro. Que haya siempre constancia. No vayamos a hacer luego una certificación sin base documental.
El resto de detalles será debidamente comunicado en la sede gorvoranera. Allí te atenderemos con sumo gusto y te podremos aclarar cuantas dudas tengas al respecto. No pienses más en que pueda parecer caro. Lo compensarás, y con creces, con los beneficios futuros. Puedes confiar plenamente. No te vamos a defraudar. Somos una empresa solvente. No todas las universidades españolas pueden esgrimir esos avales.

jueves, 5 de abril de 2018

Ilusión

Recurro al diccionario con muchísima frecuencia. Íntegro ejercicio que siempre recomendará el buen amigo, y compañero de promoción, Humberto Hernández, flamante presidente de la Academia Canaria de la Lengua. Ayer lo hice con ilusión, término que suelo utilizar con cierta asiduidad para echar en cara a muchos políticos profesionales la horrible deriva de lo que era una sana acción de servicio.
Me quedé con la segunda acepción: Esperanza cuyo cumplimiento parece especialmente atractivo. Harto sabido es que ahora priman otros intereses. Más relacionados con el bolsillo que con aquellos sectores del cerebro que deberían conducirnos a echar una mano a los más necesitados. Se impone lo crematístico.
Hay hechos tan flagrantes que no deberían ser susceptibles de discusión alguna. Acontecimientos tan alejados de cualquier óptica regida por el sentido común, que habrían de significar la inmediata retirada de la confianza. Pero es que dar un paso al lado o reconocer errores imperdonables se ha convertido en barrera infranqueable. Llámalo ética, moral, buenas costumbres, modales o como mejor te venga en gana.
Barra libre para desmanes y trapisondas. Sin rendir cuenta a nadie. Porque sí, y punto. ¿Qué espejo o modelo puede simbolizar lo de Cristina Cifuentes para cualquier estudiante que se prepare con enorme sacrificio en busca de un futuro mejor? ¿Cómo puede reconocer que no asistió a clase y que fue evaluada de manera excepcional? Son tantos los despropósitos en este afer, que uno se cuestiona el porqué la RAE no suprime el verbo dimitir del diccionario. Es que está muerto, difunto, cadáver.
Pero vengámonos un poco más cerca. Y centrémonos en el robo acaecido en las instalaciones del Lago Martiánez. Un material que se manga el propio encargado de Pamarsa, por lo que he podido leer. Al que ya han despedido. Pero el político que lo enchufó en ese puesto sigue tan campante sin que se le exijan responsabilidades de ningún tipo o que se mande a mudar por dignidad, siquiera sea por prestigiar la tan denostada actividad pública. Un churro, se agarran como lapas. Y se volverán a presentar en las próximas elecciones porque, como alegan siempre, aún le quedan cosas por hacer (o sisar, vaya usted a saber), proyectos por realizar. O serán premiados por sus formaciones políticas con un ascenso a otra institución.
No se puede gobernar al pueblo sin amor y sin humildad, ha dicho el Papa Francisco. Aboga por más políticos a los que les duela de verdad la sociedad, el pueblo, la vida de los pobres. Sabe el cura Gabriel Benítez, de Toscal-Longuera (Los Realejos) y San Antonio (Puerto de la Cruz), que piso la iglesia cuando voy a un entierro, pero debo agradecerle su preocupación por temas sociales de calado –como el precitado del Papa y los que luego indicaré– porque concuerdan plenamente con la visión de un servidor acerca de la cosa pública. Y como husmeo de vez en cuando su muro de Facebook, me alegra la coincidencia.
Y cuánta razón le asiste al Obispo de San Cristóbal de Las Casas (Estado de Chiapas, México), Felipe Arizmendi, porque sus argumentos son auténticas cachetadas a los apoltronados que te miran por arriba del hombro, esos engreídos personajes que, a lo peor sin saber hacer la o por un canuto, imparten lecciones cual doctos catedráticos. Van unos brochazos:
No se dejen engañar por promesas que son difíciles o imposibles de cumplir. Que el pueblo no se deje comprar por dádivas pues pareciera que el control del pueblo es con dinero y no con proyectos ni con políticas para el bien común. La buena política es dar la vida para que otros tengan una vida mejor.
En todo el hocico de bastantes cargos públicos estupendamente remunerados de ahora mismo. Solo pido ilusión, que lo demás vendrá por añadidura. Y tú, elector, abre los ojos. Lo de los pajaritos preñados es cuento chino.
Y esta noche vuelve a reunirse la Peña Los Roques. Vamos en serio. ¿Utopía? También. Defendemos otras maneras, que no es poco.