Se le quedó corto

Y yo también me quedé corto en el artículo de ayer. Porque el señor de la foto abandona a los realejeros por la poltrona santacrucera. Prefiere ser Excmo. Sr. Diputado. Viste más que la de alcalde pueblerino. Ni ‘comparancia’, que diría un amigo. El Licenciado en Administración y Dirección de Empresa (como está en singular, debe ser la de él), especialidad en Márketing, por la Escuela Superior de Management y Preston University (in Wyoming, United States), y de experiencia profesional, político (según reseña biográfica publicada en la web oficial del Parlamento de Canarias: ver segunda ilustración), pasará a cobrar de otra administración pública. Dinero que sale del mismo sitio (bolsillos tuyo y mío), que supondrá la exclusividad a los asuntos legislativos de estas ínsulas, pero que no es incompatible con percibir varios cientos de euros más por la presencia en las sesiones plenarias y comisiones del ayuntamiento realejero. Que será dirigido, obviamente, por Adolfo, al que muchos funcionarios (sotto voce, of course), por cierto, no pueden ver ni en pinta. Así lo expresamos en estos peñascos, que en lugares de más enjundia dirían ni en pintura. Vivan las Bellas Artes.

Con la duda existencial de si los méritos académicos alegados disfrutan de convalidación oficial en España (bastante escamado –no lo encuentro en el diccionario, pero tú, si tienes unos años como yo, lo has oído alguna vez– está uno con másteres adulterados, trabajos fin de grado ficticios y academias tipo sálvame, y ahora sin rosco), porque me da que guarda el tema cierto parecido cuando años atrás los adinerados “adquirían” títulos en ciertas universidades irlandesas.

Pues sí, el señor Domínguez se dedicará en cuerpo y alma al Parlamento en esta X Legislatura. Aunque si es con idéntica modalidad a lo que ha venido haciendo en la Villa de Viera desde 2011, me van a tener que guardar dos cachorros, porque con uno no me da. Iba a escribir dos conejos, pero eso sería más fácil dadas las dotes de cazadores de algunos populares. Y fotos existen que lo demuestran.

Me da que los engaños a partir de ahora serán, como mínimo, dobles. Y como ya los realejeros estamos acostumbrados a las ausencias, cuídate Gustavo Matos en pasar lista todos los días o se te agotará el montante de la partida correspondiente en viajes y dietas. Que ya lo decía mi padre: un arregosto es malo de quitar. Y como ya está engolosinado, se le puede crear muy fuerte trauma si le quitan el chupete.

Quien mucho abarca, poco aprieta, sostiene el dicho popular. En canario he escuchado que quien mucho ‘abraca’, poco ‘atraca’. Sea de una u otra manera, don Manuel entiende la político como un servicio a sus intereses personales (o profesionales). Y poco le importa que ande a salto de mata. Como cuando de menudo nos mandaban a coger hierba para los animales de la casa (entiéndase conejos, cabras y vacas) y nos leían previamente la cartilla con el ‘todo ajecho’ (deformación fonética del verbo ahechar; que los canarios para convertir la hache en jota somos unos artistas).

Señores (y señoras) realejeros (y realejeras), tomen debida nota. Y sigan comprando humo embotellado. Porque ahora se presumirá de ahorrar unos euros al presupuesto municipal. Te apuesto los 50 céntimos consabidos que ese dinero no irá a la reforma y mejora de los colegios, verbigracia, sino que seguirá consignado en el capítulo pertinente para incrementar el sacrificio de los liberados restantes (todos), dado el potencial aumento de sus labores. ¿Y te lo crees, simplón?

Lo malo, o lo peor, es que los que aquí se quedan continuarán como hasta ahora, es decir, sin poder decisorio alguno. Porque el pluriempleado es, además, el jefe del organigrama político y donde manda capitán, móviles al canto.

Me da, Manolo, que ni con dos besitos se me va a quitar el monumental enfado que cargo por mor de tus andanzas. ¿O mejor trapisondas? Las mayorías absolutas mal administradas conducen a totalitarismos con facilidad pasmosa. Y recuerda que no todo el monte es orégano. De nada, hombre; un consejo estará siempre dispuesto hasta para los enemigos que en la actualidad no tengo. ¿Mañana? ¿Y tú piensas que soy adivino?